La marplatense sumó dos medallas en el Sudamericano: oro en 1.500 metros llanos y plata en 3.000 metros con obstáculos, para convertirse en una de las grandes figuras del torneo.
En días consecutivos, la marplatense Micaela Levaggi ganó dos medallas en el LIV Campeonato Sudamericano de Mayores de atletismo. Al oro del viernes, en los 1.500 metros llanos, le sumó la plata del sábado, en los 3.000 metros con obstáculos. Dos podios, dos celebraciones mayúsculas rodeada de sus afectos y todavía con muchas cosas buenas por delante. Sin dudas, este torneo será inolvidable para la carrera de la atleta conducida por Leonardo Malgor. Esto dijo en la zona mixta:
-Te faltó poquito para ganar tu segundo oro pero igualmente seguro estarás conforme…
-La verdad es que sí. Yo siempre dije que mi objetivo en este Sudamericano era poder alcanzar una medalla. Era difícil, y me voy con dos, así que no podría haber esperado más de este campeonato en mi ciudad. Traté de resetearme, porque el viernes había sido un día de mucha emoción, con gran desgaste mental. Me propuse despertarme como si fuera un día cualquiera y pensando que después podría festejar. Estoy súper contenta porque ahora tengo mucho que festejar, con mucha gente que me acompañó hasta acá y va a festejar conmigo. Eso es muy importante.
-Si había alguna duda sobre tus condiciones para los 3.000 metros con obstáculos, quedó más que claro que las tenés. ¿Cómo te sentiste?
-Es cierto que me llevé la medalla pero también noté que me falta experiencia en esta prueba, ya que es la segunda vez que la corro. Y al tratarse de un Sudamericano, creo que mentalmente eso me jugó un poquito en contra. Sentía la diferencia de la experiencia y la técnica con las otras rivales. Obviamente que una trata de no ver a las demás y concentrarse en su carrera. Por eso me mantuve firme y traté de pegarme a la primera hasta el final, aunque en la última vuelta se me escapó. Igual estoy super orgullosa porque ella es una gran corredora. Tatiane (Da Silva) ha sido olímpica más de una vez, tiene mucha experiencia, tira un montón y el récord sudamericano es de ella. Haber estado con ella hasta la última vuelta me deja más que satisfecha y con muchas expectativas sobre lo que puede significar esta prueba para mi, más adelante.
-¿Esta vez el chiflido de Leo Malgor no dio resultados?
-No había más piernas (risas). En cada obstáculo, en cada salto me dolían las piernas un montón. Estoy contenta porque no me caí, que era mi mayor miedo en esta prueba, porque tiene más riesgos que las competencias llanas, a las que estoy más habituada. Pasar mal un obstáculo puede ser una caída y un golpe duro, así que me siento súper orgullosa de lo que logré.